domingo, 25 de diciembre de 2011

Un ensayo fulmina la figura de Freud


Este libro derriba los cimientos del Psicoanálisis.
El prestigioso filósofo francés Michel Onfray, ha escrito un ataque virulento contra el psicoanálisis y principalmente contra el Freudismo. 
El autor reexamina las obras de Freud, así como su biografía para desvelar sus inconsistencias y contradicciones y ofrecer una conclusión implacable. 
Argumenta qué el psicoanálisis no es más que el producto de las influencias de la psicología, de la literatura y la filosofía. 

En esta obra publica su demoledor ensayo contra el "Padre" del psicoanálisis, "Extendió al mundo entero sus neurosis  para que fueran digeribles", "Tumbó a su propia hija en el diván durante años, pese a las normas", Su método era para ricos a los pobres la enfermedad les iba bien para huir de su vida", "Es conservador, bajo una capa emancipadora nos somete a una nueva religión"

Bajo la pretensión de edificar una ciencia, Sigmund Freud (1856-1939) erigió, en realidad, una construcción artística, una filosofía que ha ejercido enorme influencia en Occidente pero que tiene más que ver con la literatura y el pensamiento mágico que con un análisis del mundo que pueda ser universalmente compartido. Esa es, a grandes rasgos, la tesis nuclear del ensayo Freud. El crepúsculo de un ídolo (Taurus), que se puso a la venta el pasado viernes y que dibuja a un Freud megalómano y mentiroso, adicto a la cocaína durante diez años, con una relación insana con sus padres –y ya no digamos con su hija Anna– y “obsesionado en extender al mundo entero sus propias neurosis con el fin de hacerlas más digeribles”.
El libro –que llega a España precedido del debate que generó el año pasado en Francia– es obra del filósofo Michel Onfray (Argentan, 1959), conocido, sobre todo, por su Tratado de ateología (Anagrama / Edicions de 1984) de hace seis años, un inesperado superventas en el que reivindicaba un nuevo modo de ser ateo, positivo, hedonista y defensor de la vida terrena frente a todo tipo de trascendencia. Las críticas al psicoanálisis –cuya eficacia terapéutica Onfray equipara al efecto placebo– no son algo nuevo, existen casi desde que esta disciplina vio la luz y las han formulado, por ejemplo, autores como Wittgenstein, Popper o Sartre, pero sin duda la habilidad del ensayista normando como divulgador y agitador otorgan al tema una renovada actualidad.
Onfray establece los diez puntos clave del freudismo y les contrapone diez réplicas, que desarrolla a lo largo de las casi 500 páginas del volumen. Frente a la importancia que esta doctrina da a los lapsus, los actos fallidos y los sueños, por ejemplo, el autor sostiene que “es posible, en efecto, atribuir un sentido a estos sucesos, pero de ninguna manera desde una perspectiva estrictamente libidinal y edípica”. El psicoanálisis “procede, básicamente, de la biografía de su inventor y funciona a las mil maravillas para comprenderlo a él... y solo a él”. Freud, en efecto, sintió deseo sexual hacia su madre, un fuerte rechazo hacia su padre y tuvo deseos incestuosos y una situación familiar confusa, “con renuncia a la sexualidad conyugal incluida”. Sus teorías serían, así, “la extrapolación a la humanidad entera de nociones que a él sí le encajaban como un guante”, como el complejo de Edipo.
Asimismo, el retrato que haceOnfray de la relación de Freud con su hija Anna resulta estremecedor. “Desde los 13 o 14 años, la hace asistir a las reuniones de la Sociedad Psicoanalítica de Viena. Sorprende que un padre exponga a su joven hija a debates sobre la sexualidad anal, el incesto o las más oscuras perversiones sexuales”. Hay más: “Pese a la deontología definida por el propio Freud, que exhorta al psicoanalista a no tender jamás en su diván a allegados o familiares, él sometió a su hija Anna a análisis desde 1918 a 1922 y luego de 1924 a 1929, a razón de cinco o seis sesiones semanales. Es decir, que su propia hija le tenía que contar sus fantasías sexuales, sus angustias, su vida íntima... Freud contribuyó a crear los fantasmas de su hija, como el deseo de ser pegada por el padre, y se mostró con ella como alguien celoso, posesivo y tiránico, alejándola de los hombres. Anna terminó por ser lesbiana, y Freud, ni corto ni perezoso, tumbó en su diván... ¡a la compañera de su hija!”.
Lo peor, en cualquier caso, es la falta de deontología de Freud, según el relato de Onfray, quien detalla manipulaciones flagrantes de sus casos clínicos –a los que “curaba solo sobre el papel”–, destrucción de correspondencia, falsificación o directamente invención de casos... “Se trataba de que nada desmintiera sus teorías”. Onfray lo hace responsable del sufrimiento de mucha gente, así como de “dos muertes directas” de pacientes, entre ellas “la de un amigo suyo que se inyectó cocaína siguiendo sus indicaciones, lo que luego él, cobardemente, negaría”. Algunos ejemplos parecen, contados por Onfray y con la distancia que da el tiempo, ciertamente risibles: a una mujer que tiene un eccema alrededor de la boca le diagnostica que su padre la obligó a una felación de niña; a un paciente que tiene pánico a afeitarse y no consigue beber cerveza, le dice que ello debe de ser a causa de que, en su infancia, vio a su niñera sentada con las nalgas desnudas en un tazón de afeitar lleno de cerveza “para hacerse lamer a continuación” (“¡situación muy probable, en efecto!”, se divierte Onfray, que ve intolerable que “un terapeuta envíe a casa a todos sus pacientes con el diagnóstico de que la heterogeneidad de sus males depende de una sola y la misma causa: un trauma infantil debido a un abuso sexual”). El mismo Freud abandonaría este radicalismo por un tiempo pero Onfray lo atribuye a que “los pacientes empezaron a desertarle”.
Todo ayuda al dibujo que persigue el autor de este Freud...: desde sus coqueteos con el ocultismo y la telepatía hasta su adicción a la cocaína (“necesito mucha”, le escribe a un amigo) pasando por la avidez por el dinero y la ascensión social, que lo condujo, según Onfray, “a idear un método que le permitiera hacerse rico, solo apto para los burgueses adinerados”, pues llegó “a rechazar a los pacientes pobres, argumentando incluso que para ellos la enfermedad era preferible a su triste vida cotidiana, una especie de vía de escape”. Onfray ha calculado que Freud cobraba el equivalente a 415 euros por sesión. Cada sesión duraba una hora, y llegó a tener hasta diez diarias, “con lo que al final del día se embolsaba no menos de 3.300 euros, y hay que decir que en las sesiones de la tarde se dormía con frecuencia, lo que llegó a justificar como algo que no afectaba a la terapia”.
Los capítulos finales se consagran a mostrar por qué, en opinión del autor, el psicoanálisis no es un movimiento liberal o progresista, sino conservador, pues lo que ha hecho es, “bajo una capa emancipadora, someternos a una nueva religión secular, cuyos mandamientos, como sucede en las sectas, no son nunca demostrados sino que basan su validez en la palabra del hechicero. La izquierda, al menos en Francia, se cree todavía la leyenda de Freud como liberador, judío progresista, amigo de las mujeres... pero en realidad tuvo simpatías por los cesarismos políticos del siglo XX, como testimonia una dedicatoria extremadamente afectuosa que le hizo a Mussolini en 1933... Fue misógino y falócrata”. Las opiniones homófobas de Freud –quien también vio la masturbación como una patología– son traídas a colación por Onfray para redondear su retrato.

Aportación: 
Alejandro Anaya
Diseño:
Alejandra  Cueto
Fuente: 

Nota: 
Queda a criterio propio tomar la información como valida o simplemente descartarla. 



jueves, 15 de diciembre de 2011

¿Qué nos pasa?

 "Verdaderamente, el hombre es el rey de los animales,
pues su brutalidad supera a la de éstos" 
Leonardo Da Vinci


Es probable que en tu vida hayas visto un animal perdido, abandonado o herido cojeando en el camino.
Aunque hay mucha gente en el mundo que quiere a los animales, desafortunadamente  hay otras personas qué lo maltratan.
Cada día, hay miles de animales abandonados en la calle sin que nadie los cuide.
Muchos de ellos se alejan y se pierden.
De repente, estos pobres  animales tienen qué cuidarse solos.
Encontrar comida , un lugar caliente y seco para dormir. 
Muchos de estos animales se  mueren de hambre y otras enfermedades. 

Este vídeo espero qué sensibilice sus corazones y  tengan conciencia de los hechos. 

Los animales son utilizados en investigaciones científicas:
Para estudiar  las enfermedades y aprender a curarlas, 
Pruebas para productos nuevos (maquillajes, cremas, etc).

Es hora de cambiar este rumbo, los animales también sienten y esta comprobando mediante estudios (Brooks, 2011). 


En los hogares violentos, los animales son utilizados y  maltratados de forma habitual con la finalidad de AMENAZAR o INTIMIDAR a los niños,
mujeres, y ancianos de la familia. El maltrato a animales puede ser un factor predictor de la violencia en
el hogar.



Este maltrato se hace principalmente para poder ejercer el
PODER y la DOMINACIÓN.


Hoy levanto la voz mi voz por ellos, y sueño con un mundo en el que la raza animal recibirá un trato justo y.... ¿humano? 



Se traduce en tres derechos fundamentales:
- El derecho a la vida
-No a la tortura
-A vivir una vida libre y no ser considerados propiedad
del ser humano.


http://bearpolarcollective.blogspot.com/ Es una persona comprometida en tratar estos asuntos con gran interés.
Nos ofrece información acerca de qué sucede y medios de como adoptar a un animal.

DI NO A LA VENTA. DI SI A LA ADOPCIÓN
Si estas interesado en adoptar a un animal ingresa a esta página para mayor información.

No debemos esperar a qué alguien nos ponga el ejemplo.. mejor empecemos desde ahorita!
Aportación:
Alejandra C.
Referencias: 

Brooks, E. (2011). La voz de los animales. Guangzhou: Benchmark.






lunes, 12 de diciembre de 2011

El arte del tango...




"Una vida sin arte, es como caminar sin sentidos"

(Elbert Ramos, 2011).


Remontando a Pitagoras..


Pitágoras entendía la música como el nexo de unión entre el hombre y el cosmos. 
Veía al cosmos como una extensa relación armónica.
Para Pitágoras concluía qué lograba restablecer curas  en caso de mal carácter y restableció a su orden original la armonía de las facultades psíquicas (Roig, 2002). 


Este magnifico vídeo qué les presento conocido como "En tus brazos" nos muestra como a través del baile, la pareja baile armoniosamente el tango de la vida, es una de las danzas más sensuales qué existen.
tiene un propósito lo cual lo cumple con un enorme énfasis. 


Lograr el dialogo corporal, mostrar plasticamente un sentimiento, una emoción, un anhelo, mientras que la música le habla al corazón con palabras qué se comprenden en todos los idiomas, sin necesidad de hablar. 






Un libro a recomendar  es: 
"Amarse con los ojos abiertos", del autor Jorge Bucay.

Donde uno de sus fragmentos más enriquecidos es: 

"Lo primero que hay que aprender del tango es el abrazo" 






"En el tango los cuerpos tienen qué armar un circuito de tensiones encontradas. El brazo tiene qué ser firme pero sin empujar.Las piernas en contacto, pero sin asfixiarse ni impedir el movimiento.Tengan en cuenta que este baile el equilibrio no está en cada uno, sino el centro de los dos, y si no se entienden pueden desestabilizarse. Tienen qué aprender a comunicarse para poderlo disfrutar juntos".

"El tango es una danza de pareja abrazada  en un brazo de contención, no estrujamiento, Abrazar es dar con los brazos abiertos y que da con los brazos abiertos recibe con todo el cuerpo. Así unidos los dos  integrantes se desplazan por el espacio, pero no es un espacio cualquiera. Al contrario, es un espacio creado por los dos". 

"No lo olviden al bailar están dialogando, nunca imponiendo. Uno habla y después de escuchar el otro contesta. Atención solo después de escuchar. Porqué en el tango, como en la vida, si no me tomo el trabajo de escuchar, voy a presuponer que se lo que me van a decir y nunca contestaré al otro. Así el dialogo real deja de existir y se convierte en un monólogo. Esto es lo que están haciendo, y  esto no es bailar tango, que es una danza de pareja en la que uno improvisa de acuerdo al movimiento del otro".

"Es un verdadero diálogo corporal y amoroso donde los dos manejan la autodeterminación y donde también hay momentos de silencio, un silencio que necesariamente forma parte del diálogo, que lo enriquece si quieren, porque nunca lo anula. En este diálogo los dos pueden proponer , porque aunque uno tome la iniciativa del primer movimiento, de acuerdo como sea la respuesta, ya sea por velocidad, amplitud o dirección, es el siguiente movimiento. Por eso hay que aprender a vivir el error como posibilidad de enriquecimiento. Si esto no hubiese sido así, el tango no existiría".
No deben enojarse ante un fallo, busquen el contacto con el otro e intenten crear juntos. Finalmente el tango también es una forma de autoconocimiento , porque así como en nuestra vida de relación, ya sea como amigo, amante o padre, conozco la calidad de tal a partir del otro, en el tango puedo ser un protector o protegido, un dominado o un dominador, puedo ser infinitamente tierno, violento o tal vez la mezcla de todo eso y mi pareja esta allí para mostrármelo.

Aportación: 
Alejandra C..


Referencias: 
Roig, O. (2002). El arte de la numerología. España: Robinbook.